¿Las Dietas Con Fibra Me Ayudan Para Bajar De Peso?

Empecemos aclarando que la fibra vegetal le agrega volumen a la dieta y, dado que hace que usted se sienta lleno más rápidamente, puede ayudarle a controlar el peso. La fibra igualmente ayuda a la digestión y a prevenir el estreñimiento.   Existen dos tipos de fibra: soluble e insoluble.   Primero, la fibra soluble atrae agua y la convierte en gel durante la digestión, haciendo que el proceso digestivo sea lento. La fibra soluble se encuentra en el salvado de avena, la cebada, las nueces, las semillas, los fríjoles, las lentejas, las arvejas y algunas frutas y verduras. Se ha comprobado científicamente que este tipo de fibra reduce el colesterol, lo cual puede ayudar a prevenir una cardiopatía.   Y finalmente, la fibra insoluble se encuentra en alimentos como el salvado de trigo, las verduras y los granos integrales. Este tipo de fibra parece acelerar el paso de los alimentos a través del estómago y de los intestinos, y le agrega volumen a las heces.   Todas las dietas ricas en fibra disminuyen el apetito, reducen la cantidad de alimentos consumidos y previenen el aumento de peso.   Asimismo, las dietas con fibra disminuyen la densidad de energía de los alimentos, lo que trae como resultado una disminución en el consumo de calorías y el apetito. También, este tipo de alimentos son más lentos para masticar, por lo cual ayudan a satisfacer el hambre y reducir el tamaño de las comidas.   Un estudio holandés resolvió que las fibras más viscosas, tales como la pectina, betaglutanos y goma “guar”, disminuyen el apetito más que las fibras menos viscosas como el trigo, la avena y el maíz. Sin embargo una dieta alta en fibra sólo disminuye la ingesta de energía en un 2.6% comparado con dietas bajas en fibra.   El hecho de aumentar el consumo de fibra promueve el control de peso, pero no es un remedio para la obesidad, es decir, es una parte de la ecuación.